¡Hola, Bienvenidos!

¡Hola amigos!


Os abro encantada las páginas de este blog. ¡Bienvenidos!

La cocina para mí es entretenimiento, un motivo para relajarme, expresarme, experimentar y hacer disfrutar a quienes prueban mi comida; incondicionales mi familia y amigos (siempre muy agradecidos), tengo motivos para poner pasión en cada uno de los platos que hago, ojalá logre transmitírosla.


Lo dedico a mi madre.

jueves, 30 de abril de 2015

PANECILLOS DE TAPIOCA




Hace tiempo que tengo olvidados los panes, de hoy no pasa que os traiga esta receta, así es que os la voy a explicar enseguida.

Estos panecillos de tapioca para aperitivos resultan muy ricos. Los podéis rellenar con lo que más os guste. También solos, sin nada, quedan fenomenales pues son muy ligeros y no cansan, de una sentada os podéis comer seis o siete sin enteraros.

Me diréis que de dónde he sacado la idea de usar tapioca en lugar de "harinas normales". Resulta que hace tiempo cayó en mis manos un artículo de una revista en la que se hablaba de unos panes de tapioca originarios de Brasil, en donde son tan apreciados que hasta se venden en puestos callejeros. Decidí improvisarlos, por supuesto usando la tapioca. Como fueron un éxito guardé la receta y hoy os la traigo con mucho gusto para que la compartáis conmigo, si os apetece. ¿De que si son los mismos que se hacen en Brasil? ¡ni idea! este blog se llama Alicia y sus recetas, aquí podéis encontrar de todo, jajaja.

La tapioca, yuca, mandioca... se obtiene de una planta que nace por extensas áreas de los trópicos, siendo muy usada y estimada por todos los pueblos que la habitan dado su alto valor nutricional. Aunque algunos de vosotros no la hayáis utilizado nunca, estoy segura que habéis, al menos, oído hablar de ella. En España se ha usado desde muy antiguo y la hemos empleado en distintos guisos para espesar y dar consistencia (mi madre lo hacía), probablemente tendrá otras aplicaciones pero para mi son desconocidas.


 

Ingredientes:


- Leche de almendras o de vaca 125 ml.
- Agua 150 ml.
- Sal fina 1 cdta.
- Aceite suave de oliva 4 cdas.
- Tapioca 180 g.
- Maizena 72 g. + un extra para enharinar.
- Huevos (L) 2.
- Parmesano rallado 85 g.
- Huevo batido para pincelar.





Elaboración:

Ponemos a hervir en un cazo el agua, la leche, el aceite y la sal.


Aparte, mezclamos la tapioca y la Maizena. Volcamos los líquidos encima y unimos rápida y enérgicamente la masa, integrando bien. Dejamos templar.


 


Batimos los huevos y los incorporamos a la masa con un batidor de aspas (si tenéis procesador os será más cómodo pues es muy densa y se os puede entrapar, yo lo hago sin él y en cuanto se me hace difícil amaso cinco minutos sobre la encimera, ligeramente enharinada con Maizena). Incorporamos el parmesano, mezclando. Dejamos reposar unos minutos.





Encendemos el horno a 190 ºC ( precalentarlo antes de hornear).


Formamos bolas del tamaño de un profiterol y las colocamos sobre una bandeja con papel (como es pegajosa la masa untaros un poquito las manos con Maizena). Pincelamos con huevo batido.


Introducimos en el horno y mantenemos aproximadamente treinta minutos.




lunes, 27 de abril de 2015

BIZCOCHOS DE FRUTA



"Me obligo" gustosamente a dar la receta de estos bizcochos, después de que me la han pedido. Hace tiempo que vengo haciéndolos aprovechando las frutas de temporada. Siempre quedan más jugosos que los bizcochos normales pues la masa se queda más hidratada al ponerle la pulpa de las frutas.
Se puede poner sólo el zumo, pero también la fruta entera. Yo hago las dos versiones, pero hoy toca la receta que la lleva integrada. Se le quita la piel a la fruta y se le retiran los huesos (si los tiene), luego sólo hay que batirla y proceder como de costumbre. Contad con que son bizcochos más húmedos.

 

En su tiempo (el año pasado) hice uno de ellos con la fruta del carambolo. En el márgen de la izquierda lo véis. Un detalle y el corte en las fotos de abajo.

Hoy os dejo el bizcocho con naranja. Para hacer los demás tendréis que sustituir el peso de la naranja, más o menos, por el mismo de la fruta elegida.







Ingredientes:


- Huevos 3 L.
- Yogur blanco, sin azúcar 1.
- Azúcar 2 vasos (con la medida del vaso del  yogur).
- Harina de repostería 2 vasos (con la medida del vaso del yogur).
- Naranja 1 y su piel rallada (tamaño medio, unos 250 g.).
- Levadura química 1 sobre.
- Aceite de girasol 1 vaso (con la medida del vaso del yogur).






Elaboración:


Preparamos un molde engrasado y enharinado. Encendemos el horno a 180 ºC.



  
Rallamos la naranja (no tratada) y reservamos su ralladura. Retiramos la piel blanca de la naranja muy bien (para no dar amargor al bizcocho) y si tiene huesos los retiramos igualmente. Cortamos en trozos y la batimos (batidora con cuchillas) con el aceite hasta hacerla puré.





 



Batimos las yemas con el azúcar al punto de blanqueado (con varillas). Incorporamos la ralladura, la naranja batida con el aceite y batimos unos minutos más.




 





Incorporamos tamizadas la harina y la levadura, a mano.











Añadimos las claras montadas con varillas, firmes, con un pellizquito de sal, en dos veces, envolviendo con cuidado la mezcla.





 




Volcamos en el molde y horneamos cuarenta y cinco minutos (según horno). Vigilad la cocción clavando una aguja en el centro del bizcocho.







Desmoldar, cuando haya reposado, sobre rejilla.



Adornad a vuestro gusto.



viernes, 24 de abril de 2015

CINTAS DE JUDÍAS VERDES CON JAMÓN



Debería hacer una sección con recetas de mis amigas, me lo estoy pensando ¡claro, que contando con ellas!

Hace un tiempo os enseñé cómo mi amiga Beatriz hacía las gambas al microondas y hoy os enseñaré cómo prepara mi amiga Auxi las judías. Ellas, mis amigas, son muy modestas, no se dan importancia en la cocina y menos si se trata de estas recetas que se hacen en un abrir y cerrar de ojos, que no tienen complicaciones. Desde mi punto de vista cocinan muy bien y saben elaborar platos con más "enjundia" que los que os he enseñado, tal vez se me animen y nos pasen alguna receta de éstas, yo encantada de mostrároslas.

Me voy con la receta ya:


 



Ingredientes:


- Judías verdes planas, anchas y muy frescas 300 g.
- Jamón serrano ibérico (o blanco) 60 g.
- Ajos 2 dientes.
- Aceite de oliva.
- Sal.






Elaboración:


El secreto de esta receta está en el corte que se les da a las judías, no hay más. Todo lo demás se hace como siempre. Sin embargo, quedan tan fantásticas que probándolas una vez, será muy difícil no hacerlas muchas más veces.

Pues bien, dicho ésto, lavamos bien las judías y las cortamos a lo largo en cintas, después de despuntarlas, con un buen cuchillo (de cada una hacemos tres cortes). Si tienen hebras las retiramos.

Ponemos a calentar agua ligeramente salada y cuando rompa a hervir echamos las judías y las dejamos cocer diez minutos. Escurrimos del agua.


 



En un fondo de aceite sofreímos los ajos picados y antes de que empiecen a tomar color echamos el jamón serrano en taquitos, mezclamos un par de minutos y enseguida incorporamos las judías, sofriendo todo junto un par de minutos más.






Servimos calientes. Este plato es un verdadero disfrute ¿no pensáis lo mismo?¡¡¡Gracias, Mª Auxiliadora!!!


martes, 21 de abril de 2015

JIBIAS CON PICADA DE ALMENDRAS Y HIERBABUENA



Las jibias o sepias, tanto monta, se cocinan de muchas formas, ya como plato principal o formando parte de otros. Me gustan estos cefalópodos, casi más que los calamares, aunque no los compro mucho. El otro día cuando estuve en la pescadería las vi, estaban allí tan blanquitas y apetecibles, que decidí comprarlas y dicho y hecho. Esta receta  tradicional con la que las cociné es sabrosísima, os invito a probarla, no os va a decepcionar.


Ingredientes:



- Jibias limpias 1 kg.
- Tomate rallado 1 grande.
- Cebolla ½.
- Ajos 2.
- Perejil.
- Pimienta molida o guindilla (opcional).
- Pan de centeno 1 y ½ rebanadas (no muy gruesas).
- Almendras 12.
- Hierbabuena 3 ramitas.
- Chacolí (o vuestro mejor vino blanco de la zona) 1 copa.
- Aceite de oliva.
- Sal.



Elaboración:


Pasamos las jibias por el grifo y las enjuagamos bien. Escurrimos y secamos. Troceamos en dados parejos.


 



Las ponemos en una cacerola con un fondo de aceite de oliva, incorporando sobre ellas la cebolla y uno de los dientes de ajo, picaditos, sofriendo cinco minutos, y a continuación añadimos el tomate rallado.









Cuando pierda casi toda el agua echamos el vino y unos aritos de guindilla. Cocemos quince minutos.








Preparamos la picada friendo en aceite el pan, el otro ajo y las almendras.


 





Trituramos con caldo de la cocción y diluimos en la salsa sobre las jibias. Dejamos que cuezan cinco minutos más.







Servimos con la hierbabuena y el perejil picados por encima.







domingo, 19 de abril de 2015

GUARNICIÓN DE PATATAS Y CHAMPIÑONES



A veces nos bloqueamos y no se nos ocurre cómo acompañar una carne o un pescado, me gustaría que tuvieseis en cuenta esta guarnición tan elemental, fácil y rica. Un buen salteado de champiñones y una buena fritura de patatas combinados harán que hasta (a veces) nos olvidemos de la importancia del plato principal. No pongo foto de los ingredientes, ni del paso a paso de las dos preparaciones que vamos a necesitar (por lo fácil de su elaboración), no obstante os dejo un enlace del salteado, que tiene a mi modo de ver más complicación y que podéis ver aquí . Os dejo con ella.
Esta receta me ha dado algún problema, es la segunda vez que "la publico", sin haberla subido conscientemente antes, jajaja ¡cosas que pasan! de nuevo os la traigo por si alguien se ha quedado sin verla en la primera ocasión.




Ingredientes:




- Patatas fritas en dados.
- Champiñones salteados con ajo.
- Perejil.
- Aceite de oliva.
- Sal.






  

Elaboración:

 



Mezclamos las patatas, sin aceite, con los champiñones y los calentamos en una sartén, en el microondas o bien al horno, unos minutos antes de servir.







Espolvoreamos con perejil picadito.

Servimos enseguida.


jueves, 16 de abril de 2015

CORVINA AL HORNO CON PICADILLO DE HORTALIZAS



Es un pescado delicado y blanco que se puede preparar de muchas maneras. He elegido hoy ésta por ser muy completa, utilizando para ello unas hortalizas que le dan un alegre colorido, además de jugosidad. A ésta receta la llamo corvina tapada o escondida, ahora veréis porqué.

El picadillo que lleva este plato era habitual en la cocina de mi madre que lo usaba de manera frecuente en distintos pescados blancos y de tamaño medio-grande. Si os gusta la verdura poco pasada, que además sirva para proteger al pescado a modo de papillote, puedo haber acertado con vosotros.

Mi sobrino Luis, estudiante de hostelería, acaba de estrenar un blog de cocina, está muy ilusionado con "esta aventura", es un chico joven que promete llegar lejos, sé que es un apasionado de los fogones, precisamente su blog lleva este nombre : "Entre fogones y barricas" A este proyecto se le ha unido su novia Paloma, juntos nos van a enseñar su cocina y muchas cosas más que os pueden interesar. Si os apetece visitarlo allí os esperará con mucho gusto. Gracias amig@s.




Ingredientes:


- Corvina fresca 800 g. (limpia de la raspa central, sin espinas y sin escamas), abierta por la mitad.
- Tomate rojo 1/2.
- Cebolla 1/4.
- Ajos pelados 2 dientes.
- Perejil unas ramas.
- Vino blanco 1 copita.
- Aceite de oliva.
- Pimienta molida.
- Sal.
- Almendras en láminas (opcional).



Elaboración:


Lavar y secar el pescado con papel de cocina.

Trinchar menudos el tomate (sin piel), los ajos y la cebolla, picar el perejil menudo y mezclar. Sazonar con sal, pimienta y aceite.


 




Disponer el pescado en una bandeja de horno untada ligeramente de aceite, salpimentarlo y regarlo con un poco más de aceite.










Distribuir las hortalizas por encima. En caso de quererlas más hechas pasadlas antes por la sartén y pochadlas con un poco de aceite. Esparcir las láminas de almendra.







Introducir en el horno precalentado a 190 ºC, 30-35 minutos (dependiendo del horno y de vuestro gusto de cocción). A medio terminar regamos con el vino. Acabamos el asado y servimos enseguida.

martes, 14 de abril de 2015

GRATINADO DE HINOJOS Y APIO CON CANUTILLOS DE ATÚN



Me consta que algunos de vosotros no habéis probado nunca los bulbos de hinojo. ¡Ah! -me decía una conocida no hace mucho- ¿Eso se come...? pues la verdad es que nunca me he fijado en ellos, creo que es la primera vez que los veo.

Nadie es culpable de eso, todo es la costumbre, y si encima en nuestras casas no han sido de hinojos, pues con más razón. En la mía no lo eran.

Cuando los descubrí estaba como esta mujer, jejeje, ni por dónde cogerlos ^^
Luego, con el paso del tiempo y ya que los has probado te das cuenta de que te los has perdido y quieres recuperarlos. En ensaladas, crudos, están muy buenos, con ese toque anisado tan peculiar que nos evita sazonar demasiado. A la plancha son maravillosos acompañando pescados o carnes. Cocidos aportan un sabor suave en cremas, purés, sopas y con las legumbres quedan fenomenal. Encurtidos, no los he probado aún.

En esta receta de hoy se gratinan. Los combiné con apio, que para mí hacen una pareja perfecta. Para ponerlos como plato único he añadido atún claro en aceite, el que viene en canutillos, y queda un plato tan bueno que no debemos dejarlo en el olvido.


 


Ingredientes:


- Bulbos de hinojo frescos 2.
- Apio 4 ramas.
- Queso especial fundir, al gusto.
- Orégano, al gusto.
- Atún canutero en aceite.
- Sal.







Elaboración:



 

Al ser muy frescos los hinojos no le quito las hojas exteriores. Se lavan muy bien y se ponen a cocer en agua abundante y algo salada, cortados en cuartos. Intentad que no se rompan, manipulándolos con cuidado.

Junto a los hinojos cocemos el apio, bien lavado y sin hebras, cortado en trozos regulares.









Cocemos veinte minutos y los ponemos a escurrir para que suelten el agua (si es necesario presionar con las manos con cuidado de no romperlos).







Disponemos los bulbos en un recipiente para horno, cubriendo el fondo, intercalando el apio entre ellos. Repartimos encima abundante queso y sobre él alineado el atún y el orégano. Volvemos a poner queso y orégano.



Gratinamos hasta que se funda el queso y se dore. Servimos caliente. ¡Qué bueno!

sábado, 11 de abril de 2015

CHARLOTA DE ENSALADILLA DE PATATAS



Con este plato podemos dar un aire distinto y elegante a nuestras habituales ensaladillas de patatas. Tenéis que partir de la base de una ensaladilla corriente. A esta ensaladilla habrá que ponerle patatas, aceitunas, pimientos morrones, huevos cocidos, atún... y lo que se os ocurra que os agrade y no desentone del resto, además de su mayonesa.

Para hacerla no nos complicamos nada, pues casi todos sabemos como va. Si los que empiezan en la cocina no lo tienen claro, les explico que se trata de cocer unas patatas y unos huevos, y ya cocidos, ambos,  picarlos finos y añadir lo que más guste, generalmente se le pone atún en aceite.

No es mucha mi aportación con este plato, es simplemente dar una idea de presentación diferente. Si os sirve de algo aquí os la dejo.

Mi buena noticia es que tengo ya el ordenador en casa ¡lo arreglaron al fin! me había quedado sin disco duro. Estoy más feliz que una perdiz :) Gracias a todos por haber estado aquí.



 


Ingredientes:


- Ensaladilla de patatas con todos sus ingredientes 400 g.
- Espárragos blancos cortos, calibre medio 9-10.
- Yema cocida 1 (la clara la añadimos a la ensaladilla).
- Pimiento morrón unos trocitos.
- Mayonesa.






Elaboración:


Ponemos la ensaladilla en un bol en el que quepa justa y aplanamos, alisando la superficie. Con la hoja de un cuchillo, después, separamos con cuidado de los bordes del molde hasta abajo, volcando en el plato donde la vamos a servir. Situamos en el centro.


Calculamos la altura que tiene el montículo, para adaptar los espárragos y que queden un poco por encima (cortamos lo que sobra de ellos por la base e incorporamos, en su caso, picado a la ensaladilla), después abrimos longitudinalmente cada uno, con cuidado de no romper las yemas (se entiende, de los  espárragos, jajaja). Os aconsejo colocar los espárragos un momento antes de servir para evitar que se oxiden.

Rodeamos con los medios espárragos la ensaladilla, pegándolos con mimo y cerrando el círculo.

En la cima decoramos con mayonesa, pimiento morrón (dos o tres trocitos a modo de guinda) y la yema de huevo desmenuzada y repartida.

Por último atamos alrededor un tallo de cebollino. Unas hojas de lechuga acompañando le irán bien.

Servimos del tiempo, o fría.